Our Vision
Jesus Christ is the center of our vision. Hebron Ministries desires to exalt the Lord and share biblical keys that will enable hungry hearts to love and know the Lord in a deeper way. As people are drawn to Jesus they will be drawn to one another, and the Body of Christ will experience a greater measure of unity and love. As a result, the lost and dying world will see the beauty of Jesus through our lives rather than only hearing about Him through sermons. Jesus said, "By this shall all men know that ye are my disciples, if ye have love one to another" (Jn. 13:35). CONCERNING WORSHIP In Hebron Ministries we recognize that we still have much to learn about heaven's pattern for praise and worship. Therefore, we have two goals with regard to worship: 1) To spend time in the Lord's presence to find out what pleases Him and then humbly change our ways to conform to His ways. 2) To seek for the Lord's help so that we will not incorporate into our worship anything that proceeds from our own mind or that of others. Since the Father seeks those who will worship Him in Spirit and in truth, surely He is willing to help anyone who will wholly yield his heart to Him in this extremely vital area!
Nuestra Visión
Jesucristo es el centro de nuestra visión. Ministerios Hebrón desea exaltar al Señor, y compartir las claves bíblicas que harán que los corazones hambrientos amen y conozcan al Señor de una manera más profunda. Conforme las personas sean atraídas a Jesús, serán atraídas unas a otras, y el Cuerpo de Cristo experimentará una mayor medida de unidad y de amor. Como resultado, el mundo perdido y moribundo verá la belleza de Jesús a través de nuestras vidas, en vez de sólo oír acerca de Él a través de sermones. Jesús dijo: “En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.” (Jn. 13:35).
En relación a la Adoración
En Ministerios Hebrón reconocemos que nos falta mucho por aprender en cuanto al patrón celestial de la alabanza y adoración. Por tanto, tenemos dos metas en cuanto a esos puntos:
1) Pasar tiempo en la presencia del Señor para aprender qué es lo que a Él le agrada, y entonces, con humildad, cambiar nuestras formas de alabarlo y adorarlo para conformarnos a sus formas.
2) Buscar la ayuda del Señor para que no incorporemos en nuestra adoración algo que proceda de nuestra propia mente, o de la mente de otras personas.
3) Dado que el Padre busca a aquellos que le adoren en Espíritu y Verdad, ¡ciertamente Él está dispuesto a ayudar a todos los que estén dispuestos a rendirle su corazón en esta área tan extremadamente vital!
